Cortadores de galletas redondos o aros de emplatar (suficientes para cortar cada galleta y hornearla dentro del cortador)
Ingredientes
310gr.de harina de trigo
15gr.de levadura química1 sobre
5gr.de sal1/2 cucharadita de sal
240gr.de mantequilla muy blandita
180gr.de azúcar glas*azúcar moreno panela
5yemas de huevo
15ml.de extracto de vainilla pura o vainilla en pasta
*1 cucharadita de butter vainilla
Elaboración paso a paso
Desclara los huevos y reserva.
Pesa, mezcla y tamiza juntos la harina, la levadura y la sal.
En el bol de la batidora, con el accesorio pala, pon las yemas y tamiza encima el azúcar. Añade la vainilla y bate hasta que la mezcla blanqueé y este esponjosa.
Añade la mantequilla y bate hasta que la mezcla esté muy cremosa.
Incorpora poco a poca la mezcla de harina, en varias veces, mezclando a velocidad mínima.
Haz una bola con la masa. Envuelve con film transparente y aplana con un rodillo o la palma de la mano, hasta obtener un disco.
Deja que repose en frío de 4 a horas a toda la noche.
Puedes preparar la masa con antelación y congelarla.
En el momento en que quieras dar forma y hornear las galletas, sácala del congelador y pásala a la nevera. Déjala a temperatura ambiente una hora antes de estirarla y cortar las galletas.
Si hace calor, puedes empezar a estirar la masa recién sacada de la nevera. Debes trabajarlas muy rápido para evitar que la gran cantidad de mantequilla que llevan se derrita.
Precalienta el horno a 150 ° C. Estas galletas se hornean a una temperatura suave para que la mantequilla no se derrita. Aún así, se derrite un poco y se sale de los moldes, por eso es IMPORTANTE: necesitas discos, aros o varios cortadores redondos, porque las galletas SE HORNEAN DENTRO DE LOS CORTADORES.
Estira la masa a 1 o 2 cm de grosor, utilizando dos pedazos de papel de horno, para colocar entre ellos la masa y así, evitar añadir más y más harina.
Con cortadores redondos, corta círculos (* el clásico es de unos 5 cm). Coloca la masa dentro del cortador de galletas, encima de una bandeja para hornear forrada con papel de hornear y lleva al congelador.
Cuando el horno esté a 150º, hornea y cocine durante 20 a 25 minutos hasta que la parte superior del disco esté dorada.
Saca la bandeja para hornear del horno y déjala reposar sobre una rejilla para que los discos se enfríen.